Transformacional - Luis Rogelio Nogueras
"En el tronco de un árbol, una niña… "A Fernando Silva hijo, en 1982
y a Zoé Valdés, en 1968
"Qué lindo árbol", dice la niña.
Y el árbol, que aguardaba esas palabras,
el árbol, que nació y creció para esas palabras,
también confirma la belleza de la niña
en su secreto lenguaje
de raíces y ácidas resinas.
El largo tronco ocre, pero
sobre todo la copa del árbol
ardiendo en verdes llamas en el viento de la tarde,
y los ojos claros, pero
sobre todo la boca de la niña
en la que palpita como un pequeño animal una sonrisa,
fueron alabados. Para esos segundos de gloria
el árbol resistió a pie firme el vendaval
y la niña llegó a este paraje:
para ese mutuo reconocimiento.
La útil belleza del árbol fue singularizada:
su voz única fue reconocida
en los incontables susurros de la selva;
la frágil belleza de la niña fue descifrada;
su rostro
señalado en la anónima marea de la muchedumbre.